DAN ÚLTIMO ADIÓS A POLICÍA CAÍDO

En una emotiva y sencilla ceremonia realizada en las instalaciones de la División Policial Chincha, el jefe de esta dependencia Crnl. PNP Fernando Delboy Gonzales, a nombre de los oficiales y suboficiales que laboran allí, agradeció al militar caído en acto de servicio, Ricardo Peña Castellano (53), por sus servicios prestados al Estado peruano, por su preocupación por superarse en bien de su familia y obtener el grado de abogado, por ver y cuidar siempre a sus hijos, por ser un buen esposo y sobre todo un gran amigo que luchó por su institución policial que lo cobijó a lo largo de 34 años de servicios.

“Tú nunca vas a morir en nosotros. En los próximos días, como un recuerdo imperecedero, colocaremos en el local de la División Policial un cuadro de honor, en la que estará tu foto, tu nombre, para que todos te recordemos por siempre, querido amigo”, indico el Crl.

Posteriormente en el Cementerio General de Chincha (4.30 p.m.), donde fue sepultado Ricardo Peña Castellano, su hijo Nelson Peña (35) agradeció la presencia del cuerpo policial que lo acompañó, a sus familiares, a sus amigos y público en general quienes mostraron en todo momento su pesar.

Agregó asimismo que es un fiel creyente en Dios, que no tiene nada que juzgar, las cosas ocurren y yo simplemente agradezco de estar vivo y el haber tenido un padre ejemplar.

“Los detalles, las circunstancias, aún no estoy bien enterado, yo trabajo en el extranjero (Canadá) y acabo de llegar y salir del avión, y con la misma salté al bus y casi no logro llegar”.

2Como repito, mi padre era un hombre ejemplar, quien, como dijo anteriormente, no conocía su cama. Cada vez que yo venía a visitarlo, el único que dormía en su cama era yo, porque él cada vez que venía de un trabajo, con la misma se iba a otro y así, siempre era activo y puntual en su deber.

Por este incesante trabajo diario, yo le decía que era demasiado y que por ello se iba acabar pronto, pero eso era su forma de ser, responsable y e incansable, cordial y con muchísimos amigos como ustedes han podido ver”.

“Yo, como le dije, casi no llego, fue una causalidad del destino, por el trabajo, por la lejanía, casi me la pierdo de estar con mi padre y con todos ustedes; pero Dios y mi madre que está en el cielo ahora junto a él, hicieron que pudiera llegar y despedirme de mi padre”.

“El dolor de la familia, como ustedes podrán comprender es muy grande y por ello siempre estaremos reuniéndonos semanalmente en este camposanto, hasta que el trabajo me lo permita y, como me enseñó mi padre, siempre hay que dar amor, gracias por todo”, concluyó Nelson Peña.

A esta muestra de profundo afecto y homenaje póstumo, también se unió su compañero de armas Mario Morante Galantini, quien entre otros términos, este distinguido militar expresó: “Hace 33 años nos conocimos con Ricardo Peña Castellano. Este encuentro, fortuito naturalmente, fue en la gloriosa Escuela de Agentes de la Policía de Investigaciones en Lima, A la fecha, estamos en camino a los 34 años de servicios.

A lo mejor, pienso, es un poquito incómodo recordar la trayectoria policial de un gran amigo y colega de trabajo. Su dilatada carrera policial, Ricardo, al igual que yo, la inició en el año 1981 en la Jefatura Departamental PIP de Ayacucho, integrando el grupo contra el terrorismo”, indicó.

Mas antes, durante el estudio profesional, él integró el equipo de lucha libre en la Escuela policial; y en el año 1990 llegó a prestar servicios en Chincha.

“En nuestra provincia, desempeñó el cargo en diferentes comisarías y, últimamente, en el Departamento de Investigación Criminal (SEINCRI) Chincha.

Sé de su gran responsabilidad y trabajo que dedicó a la Institución Policial. Sé también del gran amor a sus hijos, a su familia en general y de la cordialidad y amistad que ofreció a sus amigos.

Por esto y por mucho más, pidamos a Dios que siempre lo mantenga a su diestra y en su gloria”, finalizó.